lunes, 24 de noviembre de 2014

San Salvador de Cora.



Originalmente existió un monasterio que se fundó en el siglo IV en una acrópolis. La iglesia del monasterio estaba
consagrada a Cristo con el nombre de Iglesia del Sagrado Salvador en el Campo. Cuando la muralla de Teodosio fue erigida entre los años 413-414, la iglesia se encontraba entonces dentro de los muros defensivos de Constantinopla. Este nombre también podría tener un sentido más simbólico, ya que al contemplar los mosaicos del nártex se describe a Cristo como la Tierra de la Vida. Justiniano I empezó a reconstruir la Iglesia alrededor del año 536 pero no pudo terminarse totalmente por un terremoto que se produjo el 6 de octubre de 557. El emperador ordenó entonces la construcción de un monasterio e iglesia de mayor tamaño, dedicando una de las tres capillas a María. En el siglo VIII, durante el período iconoclasta, sufrió grandes daños en las imágenes representadas. Después de la conquista de Constantinopla por los Turcos, Atik Ali Pasa transformó la Iglesia en Mezquita pero en 1948 dejó de ser mezquita y en 1958 se abrió al público convertido en Museo.
El edificio consta de tres partes principales: Nártex o vestíbulo, Naos o cuerpo principal de la Iglesia y el Paraclesion o capilla adyacente funeraria.
El templo tiene seis cúpulas, dos en el Esonártex, una en el Paraclesion y tres en la Naos. La cúpula más grande, de 7,7 m de diámetro se encuentra en el centro de la Naos.
Las pinturas italianas de la época no comparten el trazo tradicional del arte bizantino. Los movimientos de los personajes dan a sus representaciones una ligereza y elegancia incomparable, por otro lado subrayadas por una fresca coloración. Además la vasta gama de temas bíblicos dan una idea de la fuerza creadora de los maestros bizantinos a pesar del orden iconográfico impuesto. El tema principal de estos mosaicos es la encarnación de Dios en Hombre y la salvación aportada a los Hombres. La resurrección de Cristo es el motivo central de los frescos de la capilla funeraria.

Consta de un Nártex dividido, a su vez, en Exonártex y Esonártex.

En el  exonártex  se abre la portada principal occidental de la Iglesia que está abierto a lo largo de la cara oriental al paralelo esonártex. Al sur, el exonártex se abre formando una ante cámara del Paraclesion.
Al entrar, la mirada te lleva enseguida a la representación del Cristo Pantocrátor por encima del pórtico del nártex interior. En el lado opuesto, encima de la entrada principal, se encuentra la Virgen María.
         
En el esonártex, su puerta central oriental se abre a la Naos, mientras otro pórtico en el extremo sur se abre a la ante cámara rectangular del paraclesion. En su extremo norte, una puerta lleva a un corredor que va de oeste a este y que corre por el lateral norte de la naos hasta la capilla de la Prótesis.El
esonártex se encuentran dos cúpulas, la pequeña, encima de la entrada al corredor norte y la mayor está situada en el medio de las entradas a la naos y al paraclesion. Después de franquear el nártex exterior se puede ver el mosaico que representa al benefactor de la Iglesia, Teodoro Metoquites, arrodillado y con turbante, que la presenta a Cristo. Dos iconos de San Pedro y San Pablo, en mosaico, franquean el pasillo. La cúpula meridional muestra un Cristo Pantocrátor y su genealogía, la del norte presenta a María y sus antepasados.
Los pórticos centrales del esonártex conducen al cuerpo principal de la Iglesia, la Naos. Dos cúpulas de menor tamaño flanquean el modesto ábside: la del norte se localiza sobre la prótesis que la enlaza sobre un pequeño pasillo a la bema o tribuna elevada; la cúpula sur se localiza sobre el diaconico. La Dormición de la Virgen se representa en un mosaico por encima de la puerta central de la nave.
La naos no deja más a la vista que el mármol que lo decora y da una impresión de frialdad, reforzada por los tonos azules y verdes de las venas del mármol así como su escasa iluminación.
                       
Por último, a la derecha del exonártex, se abre el paraclesion. Se utilizó como capilla funeraria para enterramientos de familias o para contener monumentos conmemorativos. En la pared norte se encuentra el arcosolio con la tumba de Teodoro Metoquites y en el arcosolio de la pared sur su amigo Miguel Tornikes. La cúpula que contiene se sitúa en el centro del paraclesion. Un estrecho pasillo une el paraclesion a la naos y a los lados se encuentran un pequeño oratorio y un almacén. Las
paredes y los techos del paraclesion están principalmente recubiertos de frescos. Al fondo del paraclesion, en el ábside, se encuentra la obra maestra de la iglesia: un fresco que representa la bajada a los Infiernos o "Anastasis", donde aparece Cristo que saca a Adán y Eva de sus sepulcros, Juan el Bautista, David y Salomón.


Planta de San Salvador de Cora. 




















(Texto y fotos extraídas de www.wikipedia.org)